Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios.Romanos 8:19
Ya lo he dicho antes: La iglesia no es un lugar para coleccionar cristianos, sino una escuela donde somos capacitados para ir a llevar la luz de Cristo al mundo. El mundo se cae a pedazos porque está lleno de personas antipáticas y malvadas que lejos de cultivar valores y ser mejores personas, se preocupan por acumular bienes y llenar sus vacíos existenciales con cosas materiales.
En la iglesia aprendemos virtudes como la honradez y la fidelidad, así como el amor, no solo a Dios sino a las demás personas. El mundo está cansado de nuestra palabrería, el mundo anhela que le mostremos con nuestro buen ejemplo que Dios es bueno y poderoso para bendecir a los que en él confiamos, que le mostremos que seguir a Cristo sí vale la pena.
Escrito por: Álvaro A. Martínez
Para: minutocristiano.blogspot.com