cuando aprenda tus justos juicios.
Salmo 119:7
Ya hemos dicho en otras ocasiones que alabar es reconocer lo que alguien, en este caso Dios, hace por nosotros. El pasaje de hoy es una reflexión del salmista que da testimonio de haber comprobado que cuando aprendemos, no solo en teoría sino a través de la práctica que cuando confiamos en el criterio de Dios solo pueden venir bendiciones sobre nuestras vidas.
Nosotros también podemos beneficiarnos de confiar nuestros asuntos en las manos de Dios y dejar que él haga lo que mejor le parezca con ellos. De modo que nos limitemos únicamente a seguir sus indicaciones y dejarnos guiar por lo que a él le parezca mejor. Esto lo aprendemos en las páginas de la Santa Biblia, donde se encuentra expresada la buena voluntad de Dios, la cual es agradable y perfecta.