Yo te guío por el camino de la sabiduría,
te dirijo por sendas de rectitud.
Proverbios 4:11
El rey David, a pesar de su multitud de errores, se distingue de entre todos los otros reyes de Israel porque a pesar de sus errores siempre buscaba la dirección de Dios y lo reconocía como autoridad superior. Aunque Salomón en un principio le pidió a Dios sabiduría para gobernar a su pueblo, no se registra de que haya tenido una excepcional relación con su Creador.
A pesar de los muchos errores del rey David, hasta el día de hoy es recordado como un hombre con el corazón conforme al de Dios, puesto que sin importar cuantas veces fallara siempre se humillaba delante de Dios y estaba dispuesto a dejarse guiar por él a fin de enderezar sus caminos, lo cual lo hace realmente sabio. Puesto que el Todopoderoso sabe mejor que nadie lo que es mejor para nosotros.