De ti proceden la riqueza y el honor;
tú lo gobiernas todo.
En tus manos están la fuerza y el poder,
y eres tú quien engrandece y fortalece a todos.
1 Crónicas 29:12
En el mensaje de ayer, hablaba acerca de la naturaleza de Dios, la cual es distinta en todos los sentidos a cualquier cosa que conozcamos, ya que no se rige por las leyes del universo tal como las conocemos. Por la fe entendemos que Dios es la causa de todas y creemos todo lo que la Biblia nos dice acerca de él, así que sabemos que aquel que todo lo puede nos ama y se preocupa por nosotros.
Sabiendo que todas las cosas provienen de Dios y que él mismo nos invita a acercarnos confiadamente a él y a pedirle lo que necesitemos y lo que queramos. ¿Por qué no aprovechar esta oportunidad sin igual? ¿Por qué no disfrutar de las bendiciones que traen el aceptar la paternidad que Dios nos ofrece por medio de creer en Jesucristo?