Sólo él es mi roca y mi salvación;
él es mi protector.
¡Jamás habré de caer!
Salmos 62:2
A lo largo de la Biblia encontramos muchas referencias al poder de Dios y cómo recompensa a quienes depositan su confianza en él, en cierto modo dichas referencias se convierten en una invitación a que nosotros también podamos tener esa paz que sobrepasa todo entendimiento en estos tiempos tan caóticos en que vivimos.
Sabemos que Dios es grande y poderoso, sabemos que es el creador de todo cuanto existe y que tiene el control hasta de los mínimos detalles de nuestro entorno, lo sorprendente es que ese mismo Dios nos está invitando a que aprendamos del ejemplo de aquellos que confiaron en él y que nosotros podamos comprobar por nosotros mismos la veracidad de sus relatos contenidos en la Biblia.