La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús.
Filipenses 2:5
¿Cuando pequeño no te pasaba que estabas jugando y de repente a tu mamá se le ocurría mandarte a la tienda por algo que se le olvidó e ibas de mala gana para que no te dieran chancla? Jaja, pues no se a ustedes pero a mi me pasó y a decir verdad no era nada agradable hacer algo que uno no quiere.
Ayer precisamente estaba escuchando una charla sobre el negarse uno mismo, que es precisamente eso, aunque no queramos le obedecemos a Dios y ponemos sus intereses por encima de los nuestros. Sin embargo, podemos tomar el ejemplo de Jesucristo, quien no decidió por su cuenta venir a esta tierra sino que fue enviado y aunque sufrió, siempre hizo todo de buena gana, lo amó con todo su ser y por eso lo disfrutó, ya que él mismo decidió que su felicidad sería complacer a su padre.