Y él estuvo allí con Jehová cuarenta días y cuarenta noches; no comió pan, ni bebió agua; y escribió en tablas las palabras del pacto, los diez mandamientos.
Éxodo 34:28
Así como Dios le suplió a Moisés del vigor físico necesario para permanecer en su presencia mientras lo instruía, de modo que no tuvo necesidad de comer ni beber. Cuando nosotros nos presentamos delante de Dios, él no nos enviará con las manos vacías sino que nos enseñará todas las cosas y nos dará lo necesario para que podamos soportar.
--Por: Álvaro Martínez V.
Más escritos: minutocristiano.blogspot.com

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.