Con el orgullo viene el oprobio;
con la humildad, la sabiduría.
Proverbios 11:2
El orgullo viene a nuestros corazones cuando caemos en el engaño de las riquezas, ese que nos dice que todo lo que hemos logrado ha sido gracias a nuestro esfuerzo y sacrificio, pero ¿Podrías trabajar si tu cuerpo no respondiera? ¿Pueden hacerlo quienes están en estado vegetativo? Humildad es reconocer que somos limitados, necesitamos de otras personas y primeramente de Dios, pues es él quien nos permite seguir viviendo y nos da el poder para hacer lo que venga a nuestras manos ¿Por qué? Porque él es bueno.
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Escrito por: Álvaro A. Martínez
Para: minutocristiano.blogspot.com
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