Fuimos llamados a esforzarnos

Y esfuércense por cumplir fielmente el mandamiento y la ley que les ordenó Moisés, siervo del Señor: amen al Señor su Dios, condúzcanse de acuerdo con su voluntad, obedezcan sus mandamientos, manténganse unidos firmemente a él y sírvanle de todo corazón y con todo su ser.
Josué 22:5

Aunque no todos somos judíos de nacimiento ni estamos sujetos a la ley que fue dada por medio de Moisés, el pasaje de hoy es de vital importancia para todos aquellos que hemos creído en el evangelio de Jesucristo, pues su intención es llamar al oyente a esforzarse por agradar a Dios estudiando las enseñanzas de la Biblia a fin de ponerlas en práctica.

Nótese que no es solo leer la Biblia, congregarse, ayunar, orar y ofrendar, sino entregar todo nuestro ser para agradar a Dios en todas las áreas de nuestra vida, aplicando sus enseñanzas aunque a veces nos cueste e incluso tengamos que padecer por su causa. Esto incluye amar y perdonar a quienes nos aborrecen, también ser honesto aunque "salgamos perdiendo" pues al final nuestra recompensa viene de Dios.