1 Corintios 6:9-10
Tristemente muchos de nosotros nos hemos topado con éste tipo de personas, que a pesar de predicar la Palabra y subirle a los púlpitos a enseñar a otros, no llevan un estilo de vida que respalde sus palabras. Son más comunes de lo que creemos, incluso suelen usar la Biblia para justificar su estilo de vida tergiversando el sentido de algunos pasajes.
Es cierto que este tipo de personas se pueden convertir en un tremendo obstáculo para que quienes no conocen de Dios tengan deseos de hacerlo, incluso yo mismo antes de aceptar a Cristo rechazaba la idea de aceptar éste estilo de vida por culpa de esas personas. Sin embargo, una cosa es lo que diga la gente y otra la que enseñe la Biblia, según la cual quienes hacen tal cosa a si mismos se engañan.
Es cierto que este tipo de personas se pueden convertir en un tremendo obstáculo para que quienes no conocen de Dios tengan deseos de hacerlo, incluso yo mismo antes de aceptar a Cristo rechazaba la idea de aceptar éste estilo de vida por culpa de esas personas. Sin embargo, una cosa es lo que diga la gente y otra la que enseñe la Biblia, según la cual quienes hacen tal cosa a si mismos se engañan.
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